Uno de los indicadores clave de tu salud financiera es la
capacidad financiera de endeudamiento, es decir, a la liquidez con la que
cuentas. La liquidez es un factor clave para determinar tus posibilidades de
cubrir deudas a corto plazo.
Para determinar tu capacidad de pago sigue estos pasos:
1. Ingreso bruto
Debes considerar todos tus ingresos antes de impuestos, es decir, tu sueldo,
comisiones y otras entradas comprobables.
2. Ingreso neto
A tu ingreso bruto deberás restar los impuestos que apliquen a tu actividad
laboral, como puede ser el Impuesto Sobre la Renta. El resultado se llama
ingreso neto.
3. Gastos
Deberás determinar claramente cuáles son tus gastos, también llamados egresos,
y restarlos a tu ingreso neto. Es muy importante considerar todos tus gastos
fijos y aquellos que son variables.
Los gastos fijos son: renta, alimentación, vestido, educación, transporte,
diversión, etcétera. Asimismo, considera dentro de tus gastos fijos una
cantidad para el ahorro, el cual te servirá en caso de imprevistos. Por otra
parte, los gastos variables pueden ser: vacaciones, regalos, entretenimiento y
eventos sociales, tales como aniversarios y cumpleaños.
4. Capacidad de pago
Es el porcentaje que representa nuestro excedente después de restar impuestos
y gastos al ingreso neto. Lo que tienes que hacer para determinarlo, es
dividir el excedente entre tus ingresos netos. Cómo dato adicional, podemos
decir que una capacidad de pago es baja, cuando ese porcentaje es igual o
menor al 10% del ingreso neto, y alta cuando rebasa el 30%.
Ésta es la forma cómo las instituciones financieras determinan nuestra capacidad
de pago antes de otorgarnos un crédito.